Llamado a la acción: ¡Abrir las fronteras!

Untitledúltima actualización: 28 de abril del 2019

Desde el año 2017, decenas de miles de personas han entrado a Canadá desde Estados Unidos a través de cruces fronterizos irregulares, buscando un refugio seguro. Cada día siguen llegando más personas.

Este es un fenómeno que frecuentemente se asocia con Trump, pero que debe ser entendido en el contexto global: millones de personas han sido forzadas a dejar sus hogares y a emigrar a causa de las guerras, la opresión política, la violencia militar, la pobreza extrema, la inseguridad social, el cambio climático, etc. A pesar de estar directamente involucrado en la devastación económica y social de países del Medio Oriente, América Latina, el Caribe, África y Asia, y a pesar de haberse fundado gracias al robo de tierras indígenas, el Estado canadiense busca limitar quién entra y quién puede quedarse legalmente en estas tierras indígenas robadas.

Rechazando la narrativa racista e islamofóbica sobre los migrantes, Solidaridad Sin Fronteras llama a la apertura de las fronteras, a la solidaridad radical, a la ayuda mutua con y entre migrantes, y a la creación de ciudades solidarias. Solidaridad Sin Fronteras exige el fin de las deportaciones, de la detención de inmigrantes y de la doble pena. También demandamos un proceso inclusivo y permanente de regularización (¡Estatus para tod@s ya!)

Apartheid Global

Las fronteras empujan a las familias de país en país, separan familias y las fuerzan a abordar peligrosos botes y a hacer largos recorridos a través de desiertos y nieve. Las fronteras matan.

Esta violencia no es arbitraria. Las fronteras juegan un rol crucial en el sistema capitalista y en la llamada “crisis migratoria”. Las fronteras en Norteamérica, originalmente establecidas por guerras coloniales para beneficiar a colonizadores europeos, funcionan como mecanismos de control migratorio. Impiden a las personas dejar la violencia, la pobreza y la explotación, las fronteras llevan a las personas a la precariedad, las criminalizan y las vuelven presa fácil de la explotación capitalista y patriarcal. Las fronteras mantienen el sistema de apartheid global.

Intentos de Ampliar el Pacto de Exclusión de Refugiados de EE. UU. y Canadá

Los y las refugiadas que vienen de los Estados Unidos a Quebec y a Canadá no han tenido más opción que cruzar irregularmente en Roxham Road y en otros puntos improvisados a causa del Acuerdo del Tercer País Seguro (Safe Third Country Agreement), que fue implementado en 2004. Este acuerdo entre Canadá y Estados Unidos impide a las personas migrantes, con algunas excepciones, hacer demandas de refugio en un puesto fronterizo regular si vienen desde Estados Unidos (y viceversa). Esto significa que las y los migrantes que entran a Canadá desde los Estados Unidos solo pueden hacer una demanda de refugio si primero cruzan “irregularmente”. Esta política ya ha costado la vida a migrantes (honramos la memoria de Mavis Otuteye, quien murió en junio de 2017), y ha causado que otras personas hayan perdido su estatus legal o hayan sido deportadas.

El nuevo ministro de la “Seguridad de la Frontera” de Canadá está presionando a los funcionarios estadounidenses para que extiendan el acuerdo de Tercer País Seguro a través de toda la frontera. Si esto sucede, efectivamente se cerraría esta frontera completamente a las personas refugiadas (con algunas excepciones). Al mismo tiempo, en abril de 2019, el gobierno introdujo una nueva legislación en el proyecto de ley del presupuesto que, si se aprueba, impedirá que las personas que hayan hecho demandas de refugio en los Estados Unidos (y en Inglaterra, Australia y Nueva Zelanda), las hagan en Canadá.

El Sistema de Refugiados: enmascarando lo político, rompiendo la Solidaridad

Aquellas personas que logran hacer una demanda de refugio en Canadá son alentadas a poner sus esfuerzos y esperanzas en sus casos individuales, que traten de probar que son “verdader@s refugiad@s” o “buen@s migrantes”. Esta lucha, burocrática, larga y despolitizante, genera en estas personas aislamiento y les impide canalizar su energía en la lucha colectiva.

Al final de este largo proceso, muchas de las demandas son rechazadas. En los últimos años, aproximadamente el 40% de las demandas de refugio hechas en Canadá fueron rechazadas. Las personas cuyas demandas de refugio han sido rechazadas se enfrentan a una decisión: quedarse en Canadá sin papeles o ser deportadas a sus países de origen.

El sistema de refugio canadiense funciona sigilosa y efectivamente sosteniendo el apartheid global: juzga individualmente a las personas y, luego, fuera de la cobertura de los medios, las deporta o criminaliza, una a una.

Rechazando las divisiones raciales

El discurso dominante alimenta las divisiones entre grupos sociales que podrían aliarse contra la actual distribución injusta de riqueza y poder.
Al presentar la situación como humanitaria en lugar de política, el discurso dominante esconde el rol que juegan las fronteras en mantener esta distribución desigual. La manera en que Canadá, antes que nada, ha contribuido al empobrecimiento de quienes deben luego dejar sus hogares para migrar, nunca se menciona.

Los discursos de extrema derecha de grupos como La Meute y Storm Alliance en Quebec son alentados por la normalización de actitudes islamófobicas y racistas. Estos grupos tratan de convencer a otros de que l@s migrantes que cruzan irregularmente son “criminales” y han llegado para “robarnos.” Haciendo alusión a los miedos islamófobos y racistas contra las personas negras y morenas, los grupos de extrema derecha en Europa, Estados Unidos, Canadá y Quebec propagan la confusión y el miedo a la “invasión” y el “terrorismo”, e incentivan al Estado a expandir la seguridad de la frontera y la vigilancia de migrantes.

Así, en lugar de que el conflicto sea definido por la división entre quienes son poderosos/ricos, y quienes son pobres/oprimidos, éste se define por la división entre las personas al interior de Quebec o de Canadá (blancas) y las personas que están afuera o están llegando.

¡Llamado a la acción!

APOYAMOS LA LIBERTAD QUE TODAS LAS PERSONAS MIGRANTES TIENEN DE QUEDARSE, DESPLAZARSE, O REGRESAR. APOYAMOS ESPECÍFICAMENTE A LAS PERSONAS MIGRANTES EN ESTADOS UNIDOS, YA SEA QUE DECIDAN QUEDARSE EN ESTADOS UNIDOS O CRUZAR DE LA MANERA QUE PUEDAN A CANADÁ.

FRENTE AL ENFOQUE DEL ANÁLISIS CASO POR CASO IMPUESTO POR EL ESTADO, DEBEMOS ORGANIZARNOS COLECTIVAMENTE Y APOYARNOS ENTRE TODOS Y TODAS.

AL MISMO TIEMPO QUE NOS OPONEMOS A LA PROPAGANDA ANTI-MIGRANTE Y LAS DIVISIONES FABRICADAS POR LOS DISCURSOS DOMINANTES, CONSTRUYAMOS SOLIDARIDAD CONCRETA.

Aquí sugerimos algunas cosas que podríamos hacer en nuestras comunidades:

En todas partes en Canadá:

– SSF está convocando una Semana de Acción del 20 al 27 de mayo de 2019 contra la política peligrosa e injusta del Tercer País Seguro (con campañas públicas, foros, en medios de comunicación, etc.).

– Organizar/unirse a las movilizaciones que exigen que Canadá abandone su enfoque del caso por caso y que, en lugar de ello, implemente un programa de regularización inmediato para todas las personas que crucen la frontera y todas las personas indocumentadas que ya se encuentran en Canadá.

En zonas fronterizas:

– Organícese con sus vecinos (en ambos lados de la frontera), ponga letreros mostrando que usted apoya a quienes cruzan (“¡refugiad@s) bienvenid@s!”, etc.). Si ve a personas cruzando, ofrézcales ayuda de la manera en que ellas lo prefieran y NO llame a la Policía montada de Canadá, salvo si las personas que están cruzando se lo soliciten;
– Explore áreas a lo largo de la frontera y ayude a implementar infraestructura que ayude a las personas a cruzarla de manera segura y libre.

En Montreal:

– Apoye la movilización para la marcha ¡Construyamos Una Ciudad Solidaria Ya! Estatus para todxs! el 16 de junio (2:30 pm en el Parque Nelson Mandela en Côte des neiges).
– Apoye las movilizaciones orientadas a crear una Ciudad Solidaria, incluyendo las campañas que demandan el acceso a la salud, a la vivienda, al refugio, a la educación y a la comida, y a acabar con la colaboración entre el SPVM y CBSA.
– Para las organizaciones que ofrecen servicios: firme la declaración por una ciudad solidaria de Solidaridad sin Fronteras aquí: http://bit.ly/2lFerMi.
– Únase a la lucha contra la construcción de una nueva prisión para migrantes en Laval. Para más información:
/en/new-migrant-prison-being-constructed-in-laval-lets-stop-it ; www.stopponslaprison.info

En general, hacemos un llamado a la organización de base, efectiva, no jerárquica e inclusiva, basada en la ayuda mutua y en la solidaridad radical, usando diversidad de tácticas y acción directa para fortalecer la resistencia de nuestras comunidades a los controles de frontera y su lucha contra las deportaciones y las detenciones, así como para derrotar al movimiento fascista y apoyar activamente las luchas anticoloniales y la soberanía indígena.